sábado, 24 de mayo de 2014

Una crítica de libros bien hecha

En estas opiniones sobre el futuro del libro y de la lectura se dice: «La crítica [de libros] debe ser un juicio de presentación que dé conocimiento de lo que está en la obra. Más que adjetivar y coger el camino fácil, o decir que algo es malo o bueno, con juicios rotundos que pueden resultar más divertidos, se trata de dar elementos de juicio al lector y bases para que comprenda la obra y aprenda a valorarla por sí mismo. Es la manera útil de prescribir”.

Estoy muy de acuerdo con que hay que dar elementos de juicio al lector para que comprenda la obra y aprenda a valorarla por sí mismo, pero es imposible hacer una crítica bien si en ella no se dice lo que está mal. Por supuesto, intentar actuar así no es más divertido ni es el camino fácil sino justo lo contrario: causa problemas y lleva más tiempo. Además, una buena parte de los problemas de lectura del futuro son los elogios y los silencios cómplices o temerosos del presente a quienes no se lo merecen.